Lluisfe Pérez – De la Tierra a Eridanus

Año terrestre 2415. Han pasado 100 años desde la guerra que prácticamente hizo desaparecer la humanidad. Pero, ¿qué es la humanidad? Si consideramos la humanidad como el conjunto de todos los seres humanos, hace siglos que ese concepto se ha disuelto y la humanidad ya no está definida como tal. Si la Humanidad es la capacidad para sentir afecto, comprensión o solidaridad hacia las demás personas, definitivamente, la humanidad ha desaparecido. O quizás el último atisbo de humanidad se encuentre en los corazones de los cuatro cosmonautas que perdidos tres siglos en algún lugar del cosmos, aterrizan en un planeta Tierra que ya no es su hogar.

A su llegada, Terra es inhóspita, agresiva, corrosiva y se encuentra en un profundo estado de decadencia. Encontrar respuestas a lo ocurrido durante todo este tiempo llevará a los jugadores a tomar decisiones de las que no sólo dependen sus vidas sino también el futuro de la raza humana en el universo. Deberán encontrar respuestas y en última instancia salvar lo que queda de humanidad en este último viaje de Terra a Eridanus: Zona Cero.

 

 

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Lluisfer nos obsequió con una partida fiel al espíritu y los principios de la ciencia ficción. A saber, plantear escenarios y dilemas morales donde los avances científicos y tecnológicos tienen un papel trascendental en la situación que se narra y que sirven para explorar cuales son las consecuencias de la aplicación de dichos descubrimientos.
Las preguntas que nos planteamos en “De la Tierra a Eridanus” no estaban, para nada, exentas de profundidad filosófica. La violencia y el pacifismo, y como dichos posicionamientos influyen en la relación entre distintas culturas (o, en este caso, especies). Las alternativas a la violencia como defensa o incluso como castigo (¿Es peor la muerte o el exilio?), la manipulación genética y un largo etcétera. Lástima no disponer del tiempo suficiente para explorarlas con mayor diligencia.

Si en algo destaca la aventura que jugamos es en su originalidad, tanto en el constructo principal de la metatrama como en los pequeños detalles. Cuatro astronautas arrancados de su tiempo y un ser extraterrestre colaborando para derrotar a una ominosa amenaza que, mire usted que cosas, resultan ser pacifistas. ¡Incluso la estrategia de combate, en el enfrentamiento final, implicaba incorporar las particularidades propias de una nueva arma capaz de congelarte en el tiempo!

El universo que nos presentó estaba trabajado y Lluisfer lo manejaba con comodidad. El ritmo de la partida no se detuvo y el Máster supo imprimirle dinamismo y pasión. Faltaron ocasiones para el lucimiento interpretando PNJs, pero esa soledad y aislamiento en la que nos encontrábamos era indispensable para transmitir la sensación de abandono y desarraigo en la que se encontraban nuestros personajes. Sabiendo que esta es la última de una serie de 4 aventuras dan ganas de probar las otras tres.

 

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Ciencia ficción de la buena con esta llegada a la tierra desde el espacio y llevando un medico… Siempre es grato que te sorprendan cuando empiezas una partida.  El master fue muy bueno con nosotros y nos permitió ser algo “malos” y descantillarnos un poco, tampoco mucho que era él el que mandaba.

La ciencia ficción aunque me gusta siempre es un genero que me cuesta mas ya que sus personajes suelen tener unos que superan los mios con creces que soy aprendiz de todo y maestro de nada.

Uno de los puntos fuertes que creo que encontré en esta partida fue la adaptación del director a las locuras  que le íbamos planteando a cual mas peregrina. ( Hay que reconocer que inventiva no faltó a mis compañeros de mesa). Me sentí  mas perdida que en otras ocasiones por que al prinicipio vino mucha información que fui poco a poco
procesando y tuvo el master mas paciencia que un santo. Supo girar, adaptar e incluso driblar a los jugadores y no siempre es fácil que no se te hagan con la partida.

 

Felix1Partida muy imaginativa, desarrollando un universo entero de la nada, al no basarse en ninguno conocido. Incluso planteaba la posibilidad de llevar un personaje xeno, que suponía un reto interpretativo.Buen ritmo y exposición de las tramas, explicando lo necesario para la comprensión del mundo de ciencia ficción, además de forma muy realista y verosímil, lo que denotaba buen trabajo de investigación sobre el viaje y tecnología espacial, para extrapolarlo a un hipotético futuro.

Lluisfe se preocupó más de la trama que de los números, por lo que la partida fue muy narrativa y entretenida. Sin embargo, a veces la trama se encontró algo forzada en según qué circunstancias, como la escena en que el grupo fue capturado. Todo resultó muy conveniente y pareció un giro argumental algo antinatural. También el final estuvo algo forzado al plantear un arma que te dejaba congelado en el tiempo. Esto supuso un bucle de nuevas oportunidades a los jugadores para poder actuar, con el simple paso del tiempo como penalización. Esto provocó falta de tensión, porque al final se conocía que se lograría el objetivo con tanta oportunidad. Tampoco resultó emocionante el posible sacrificio de jugadores al final de la trama, debido a que faltó información para evaluar las consecuencias de las acciones que se realizaban. No obstante, se debe valorar positivamente que Lluisfe optara por el riesgo y aportar algo novedoso.

 

Usac1El inicio fue un poco abrupto, supongo que por ser una 4ª entrega de una saga. Aún así, funcionaba como módulo independiente.

Aunque estaba bastante guiada, los tempos fueron correctos. Hubo dilema moral pero quedó algo diluido porqué no se habían transmitido suficientemente las consecuencias de cada decisión.

La conducción fue buena y divertida.